El Instituto Nacional de Servicios Sociales para Jubilados y Pensionados (PAMI) y el Ministerio de Salud de la Nación firmaron un convenio conjunto que permitirá reducir en un 50% los costos en la compra de medicamentos oncológicos y tratamientos de alto costo. Este acuerdo, encabezado por el ministro de Salud Mario Lugones y el director ejecutivo del PAMI, Esteban Leguizamo, busca hacer accesibles estos tratamientos cruciales para pacientes en situaciones de vulnerabilidad.
Según detallaron en un comunicado oficial, la reducción se logra gracias a la implementación de «mecanismos institucionalizados» que permiten acuerdos directos con la industria farmacéutica, optimizando así la logística y disminuyendo los tiempos de provisión. Esto no solo beneficiará a los afiliados de PAMI, sino también a aquellos pacientes que, sin cobertura médica, accedían a medicamentos a través de programas provinciales y municipales.
Un nuevo enfoque para las medicinas de alto costo
Hasta ahora, la gestión de medicamentos costosos se realizaba mediante la Dirección de Asistencia Directa por Situaciones Especiales (DASE), que facilitaba el acceso a tratamientos para enfermedades graves. Sin embargo, el nuevo acuerdo centraliza la compra y distribución de estos fármacos, posicionando al PAMI como un actor clave en la provisión de medicamentos esenciales, incluso para quienes no son parte de su red.
Durante la firma del convenio, estuvieron presentes autoridades clave como la secretaria de Gestión Administrativa, Cecilia Loccisano, y el subdirector ejecutivo de PAMI, Carlos Zamparolo. Desde la institución destacaron que este cambio permitirá una respuesta más rápida y eficaz a las necesidades de los pacientes.
Polémica por el cierre del Hospital Nacional de Salud Mental Laura Bonaparte
En contraste con el anuncio positivo del acuerdo entre el PAMI y el Ministerio de Salud, el gobierno enfrenta críticas por el cierre del servicio de internación y guardia del Hospital Nacional de Salud Mental Laura Bonaparte. Según denunciaron los trabajadores del hospital, esta decisión afectará a más de 25 mil personas que se atendieron allí en lo que va del año.
Fuentes oficiales del Ministerio de Salud justificaron el cierre argumentando que, a pesar de contar con un presupuesto elevado de $16.800 millones, la ocupación del hospital es extremadamente baja, con un promedio de solo 30 pacientes internados. La cartera sanitaria aseguró que los pacientes afectados serán reubicados en otras instituciones cercanas para garantizar la continuidad de sus tratamientos.
El gobierno sigue apostando por reestructurar el sistema de salud, pero las críticas y las protestas continúan en torno a la reducción de servicios en un área tan sensible como la salud mental.
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