Caso María Cash: la reveladora conversación del camionero que complica su situación

Tras más de una década de investigaciones y giros inesperados, el caso de la desaparición de María Cash, la joven diseñadora salteña desaparecida en julio de 2011, ha dado un nuevo y escalofriante giro. El 8 de julio de 2024, se filtró una conversación entre Héctor Romero, el camionero detenido por su presunta implicación en el caso, y su hermano David, que complica aún más la situación del acusado y pone en duda sus versiones anteriores.

El intercambio, interceptado en el marco de la investigación, revela una serie de comentarios que apuntan a una conciencia alarmante de Romero sobre la reapertura del caso y su posible vinculación con la desaparición de la joven. A pesar de que el camionero negó estar involucrado en el crimen, esta conversación arroja dudas sobre su actitud frente a la investigación y sus declaraciones pasadas.

La conversación que pone en jaque al camionero

En el audio filtrado, Romero conversa con su hermano sobre la nueva citación a testigos en el caso, algo que parece haberlo tomado por sorpresa. Durante el diálogo, Romero parece indicar que es consciente de que su nombre está de nuevo en el centro de la investigación. Además, hace una reveladora referencia a su posible involucramiento con la desaparición de María Cash, sugiriendo que la joven habría sido «levantada» por él, aunque rápidamente minimiza la situación al indicar que «no sabe si será ella o no».

David Romero: «Vos lo que has dicho esa vuelta y nada más de eso, no te explayes más»

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En otro fragmento de la conversación, los hermanos discuten sobre la necesidad de contratar un abogado. Romero insiste en que no ha hecho nada malo y que no necesita defensa, ya que, según él, nunca ha sido imputado en el caso. Sin embargo, la falta de preocupación y su insistencia en la inocencia parecen desentonar con la gravedad de las acusaciones en su contra.

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Las inconsistencias que incriminan al camionero

Este nuevo material se suma a los múltiples puntos que ya mantenían a Romero bajo sospecha. Los investigadores del caso han señalado varias contradicciones y conductas sospechosas que apuntan al camionero como posible responsable de la desaparición y posterior femicidio de María Cash.

Uno de los primeros indicios es que Romero cambió varias veces su versión de los hechos, desde el comienzo de la búsqueda en 2011. En su primer testimonio, afirmó haber subido a María a su camión en la rotonda de Torzalito, pero luego se descubrió que lo había hecho a varios metros de ese punto. Además, en otro de sus relatos, indicó que nunca pudo ver la cara de María Cash debido a que su cabello le cubría el rostro, una afirmación que se contradice con los testimonios de otros testigos, quienes aseguraron haberla visto con el cabello recogido.

También se han detectado irregularidades en sus declaraciones sobre los tiempos de los traslados. Romero afirmó que tardó tres horas en trasladar mercadería entre Güemes y Joaquín V. González, pero al regresar con el camión vacío, mencionó que el viaje duraba menos tiempo. Sin embargo, los registros de antenas telefónicas lo ubicaron en el lugar de la desaparición a las 21:00 horas, mientras que Romero aseguró haber salido a las 22:00, una discrepancia significativa.

El regreso al lugar de los hechos

Otro de los puntos que complican la situación de Romero es que, según los informes de las antenas telefónicas, el camionero habría regresado al lugar donde desapareció María Cash un mes después de su desaparición. Durante este tiempo, las antenas lo ubicaron en la misma zona durante una hora y media, lo que podría indicar que estaba relacionado con el lugar en el que se cometió el crimen, a pesar de haber negado cualquier vínculo con la joven.

La detención y la imputación por homicidio

Luego de que estos elementos fueran expuestos en la indagatoria, Héctor Romero fue detenido y se le imputó por homicidio calificado con alevosía. La jueza Mariela Giménez, quien lleva adelante la causa, dictó su prisión preventiva mientras continúan las investigaciones. En su declaración, Romero mantuvo su inocencia, pero la evidencia recolectada por los investigadores lo coloca cada vez más cerca de ser el principal sospechoso del crimen.

Este avance en el caso de María Cash ha renovado las esperanzas de la familia de la joven, quienes, tras 13 años de búsqueda, finalmente ven cómo la justicia podría estar más cerca de esclarecer lo sucedido aquella fatídica noche de julio de 2011. Sin embargo, aún quedan muchas preguntas por responder y el camino hacia la verdad podría seguir deparando más sorpresas en las próximas semanas.