El 5 de noviembre, la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, representará a Argentina en un congreso para importadores en Shanghái, China, según confirmaron fuentes a MDZ. La participación de Karina Milei en este evento cobra especial relevancia en el contexto de las fluctuantes relaciones diplomáticas entre el presidente Javier Milei y su par chino, Xi Jinping.
Este congreso se llevará a cabo en un formato reducido debido a la crisis económica que atraviesa China, lo que también ha reducido la participación de empresas argentinas por los altos costos. Sin embargo, la presencia de Karina Milei busca ser un gesto político significativo para fortalecer los lazos comerciales y diplomáticos con el gigante asiático.
Reuniones clave en Nueva York
Previo a este evento, la canciller Diana Mondino se reunió en Nueva York con su homólogo chino, Wang Yi, durante la Asamblea General de las Naciones Unidas. Fuentes diplomáticas especulan que durante este encuentro se acordó la participación de Argentina en el foro económico, además de allanar el camino para una eventual reunión bilateral entre Javier Milei y Xi Jinping en la próxima cumbre del G20.
Inicialmente, se consideró que el propio Javier Milei podría asistir a China, pero finalmente fue su hermana Karina quien recibió la designación oficial para representar al país. Este viaje busca recomponer las relaciones diplomáticas con China, luego de que el presidente argentino adoptara una postura crítica hacia los regímenes comunistas, incluyendo a China.
Un giro en la diplomacia de Javier Milei
El acercamiento de Argentina a China es un giro significativo en la política exterior del gobierno de Milei, quien en el pasado se había expresado enérgicamente en contra de las relaciones con países de corte comunista. En declaraciones de hace un año, Milei afirmó: “No hacemos pactos con comunistas. No promovería la relación con comunistas. Ni con Cuba, ni con Venezuela, ni con Corea del Norte, ni con Nicaragua, ni con China”.
Sin embargo, el discurso del presidente cambió luego de que China renovara el swap de monedas, una herramienta clave para la estabilidad financiera de Argentina. Desde la oficina presidencial, se agradeció formalmente a China por la «confianza depositada en el plan económico del Gobierno».
Este viaje y la participación de Argentina en el congreso de importadores reflejan la necesidad del gobierno de recalibrar su política exterior y fortalecer vínculos con uno de los actores más relevantes en la economía mundial.
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