A pesar de su delicado estado de salud, se mostró ante miles de fieles y generó lágrimas y ovaciones.
Thank you for reading this post, don't forget to subscribe!Este jueves, el papa Francisco protagonizó un emotivo momento en la Basílica de San Pedro al salir en silla de ruedas para saludar a los fieles, en medio de su proceso de recuperación. Sin su tradicional vestimenta blanca y vestido de civil, Jorge Bergoglio sorprendió a todos al aparecer desde la Casa Santa Marta alrededor de las 13 h, generando una fuerte repercusión entre los presentes.
“¡El Papa está aquí!”, gritaban varias mujeres emocionadas mientras corrían por los pasillos del Vaticano. Su aparición, marcada por gestos de humildad y calidez, incluyó una visita a las tumbas de antiguos papas como Pío X, Benedicto XV, Pablo III y Urbano VIII, algunas de ellas recientemente restauradas.
El sumo pontífice saludó uno por uno a los presentes: fieles, peregrinos del Jubileo, niños, restauradores y personal del Vaticano. Su presencia, con una manta sobre las piernas por el frío romano y cánulas nasales para el oxígeno, generó lágrimas entre los asistentes. Incluso los guardias de seguridad se mostraron visiblemente conmovidos.
Monseñor Valerio Di Palma fue uno de los que lo acompañó durante la visita y relató el impacto que tuvo entre los presentes: “Nos conmovió verlo así, de civil, sencillo. Todos lloraban”. Según contó, al despedirse le dijo al Papa: «Santidad, estamos deseando que vuelva aquí».
La aparición fue la segunda en pocos días, ya que el domingo pasado Francisco también había salido de forma sorpresiva a saludar desde la Casa Santa Marta, convocando a más de 20.000 personas. En medio de la preocupación por su salud tras una reciente neumonía, cada gesto suyo es recibido con esperanza y emoción por millones de creyentes.
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