La cercanía del 20 de enero, fecha en la que Donald Trump asumirá su segunda gestión como presidente de Estados Unidos, genera una creciente expectativa mundial. A medida que se acerca la ceremonia de inauguración, el magnate ha intensificado su discurso, centrando sus críticas en la administración actual de Joe Biden, en particular sobre dos cuestiones clave: la oleada migratoria y los recientes actos de violencia que sacudieron el país.
Thank you for reading this post, don't forget to subscribe!Uno de los eventos que ha acaparado la atención y vinculado directamente a Trump fue la explosión de un auto Tesla modelo Cybertruck frente a uno de sus hoteles en Las Vegas. Este incidente, junto con el atropello masivo en Nueva Orleans, que dejó 15 muertos, han alimentado las críticas de Trump hacia el gobierno de Biden. Las autoridades estadounidenses investigan los posibles vínculos entre ambos hechos, mientras el expresidente aprovecha la situación para recalcar la necesidad de un liderazgo fuerte y una política de seguridad más estricta.
Caravana migrante y discurso presidencial
Un hecho adicional que ha avivado las tensiones ha sido la primera caravana migrante del año, que movilizó a más de 1.500 personas desde México hacia la frontera con Estados Unidos. Las imágenes de la caminata masiva se viralizaron rápidamente en redes sociales, especialmente entre la comunidad latina, generando un fuerte impacto en la opinión pública estadounidense. Ante esta situación, Trump no dudó en hacer declaraciones duras: «¡Nuestro país es un desastre, el hazmerreír de todo el mundo!», expresó, criticando lo que considera una «frontera abierta» bajo el liderazgo de Biden.
En su publicación en la red social Truth Social, Trump acusó a los demócratas de ser «incompetentes y corruptos» por no actuar con firmeza ante la violencia y el desorden en el país. Además, sugirió la intervención de la CIA para detener lo que considera una «erosión violenta» de la seguridad y la democracia en Estados Unidos. «Nos vemos el 20 de enero», concluyó, anticipando su regreso al poder.
Javier Milei en Washington: un gesto de afinidad con Trump
En medio de este clima tenso, el presidente de Argentina, Javier Milei, tiene agendados sus primeros compromisos internacionales del 2025. El mandatario viajará a Estados Unidos para asistir a la toma de posesión de Donald Trump, un acto que se interpretó como un símbolo de la «afinidad ideológica y personal» entre ambos líderes. Además, Milei tiene previsto participar en el Foro Económico Mundial de Davos en Suiza, en lo que será su segunda vez en dicho evento.
La invitación de Trump a Milei a presenciar su juramento frente al Capitolio refuerza los lazos entre ambos, lo que podría favorecer la agenda económica de Argentina. El presidente argentino busca fortalecer la relación bilateral con Estados Unidos, especialmente en el contexto de la negociación con el Fondo Monetario Internacional para obtener un nuevo préstamo. También se especula sobre la posibilidad de iniciar conversaciones sobre un Tratado de Libre Comercio entre ambos países.
El viaje de Milei será acompañado por su hermana Karina, el ministro de Economía, Luis «Toto» Caputo, y el canciller Gerardo Werthein. Un posible encuentro bilateral con el presidente chino, Xi Jinping, también podría formar parte de la agenda de Milei en Washington, con el fin de seguir acercando posiciones entre ambos países.
Conclusión
La asunción de Donald Trump y la creciente cercanía entre el presidente argentino y el mandatario estadounidense marcan el inicio de un período de incertidumbre política y económica, tanto a nivel global como regional. Las decisiones que se tomen en este contexto podrían tener un impacto profundo en la política internacional, especialmente en las relaciones entre Estados Unidos, Argentina y otros actores clave en la arena mundial.