En un nuevo golpe al mundo digital, ciberdelincuentes lograron piratear la cuenta oficial de Instagram de McDonald’s. Aprovechando la enorme popularidad de la marca, los atacantes promocionaron una falsa criptomoneda llamada «Grimace» y lograron estafar a miles de usuarios por un monto superior a los 700.000 dólares.
La estafa se llevó a cabo mediante publicaciones engañosas que simulaban ser oficiales de McDonald’s. En ellas, se invitaba a los seguidores a invertir en la nueva criptomoneda, asegurando altas ganancias a corto plazo. La credibilidad de la cuenta oficial de la cadena de comida rápida fue clave para atraer a un gran número de inversores, quienes confiaron en la legitimidad de la oferta.
Sin embargo, la alegría de los estafadores fue efímera. McDonald’s detectó rápidamente la actividad fraudulenta y procedió a eliminar las publicaciones falsas. A pesar de la rápida respuesta de la empresa, el daño ya estaba hecho y numerosos usuarios resultaron afectados económicamente.
Expertos en ciberseguridad advierten sobre el aumento de este tipo de ataques, en los que los ciberdelincuentes se hacen pasar por empresas reconocidas para engañar a sus clientes y obtener beneficios económicos. Ante esta situación, recomiendan a los usuarios ser extremadamente cautelosos al recibir mensajes o promociones no solicitadas, especialmente aquellas relacionadas con inversiones o sorteos.
McDonald’s ha emitido un comunicado oficial desmintiendo cualquier relación con la criptomoneda falsa y ha pedido a sus clientes que no caigan en este tipo de engaños. La empresa también ha anunciado que reforzará las medidas de seguridad de sus cuentas en redes sociales para evitar futuros incidentes de este tipo.
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