*Marcos Lardone
Atendiendo a gentiles pedidos, hoy vamos a hablar un poquito sobre la ley bases que recibió media sanción en diputados. Por supuesto no directamente, yo no sé lo suficiente de política ni entiendo lo más mínimo sobre trámites legislativos, pero si podemos pensar en la ciencia que explica que, a mayor libertad, más riqueza. Y a medida que se crea riqueza, se erradica la pobreza. Esa es la libertad que -según entiendo- busca la ley que está en debate en el congreso.
Lo primero es presentar una herramienta que usamos mucho los economistas: los modelos económicos. Un Modelo Económico es como una «maqueta» de la realidad: se toman algunos aspectos de la realidad, y se los estudia en su interacción, sin tener en consideración nada más. Una expresión que se usa mucho es «Ceteris Paribus» que significa: «todo lo demás constante». A medida que uno avanza en los estudios, puede ir levantando «restricciones», es decir, acercando cada vez más el modelo a la realidad.
Para una explicación «económica» de la ley bases, pensemos entonces en el modelo económico de una economía donde existen solamente 2 bienes: Pizzas y Empanadas. Y que esos 2 bienes se fabrican utilizando solamente 2 insumos: Gas y trabajo.
El chiste es que esos dos bienes no se fabrican usando la misma proporción de esos dos insumos. Imaginemos que la pizza es más simple de hacer (necesita de poco trabajo) pero para que quede rica y crocante, necesita ser cocinada en un horno que consume mucho gas.
Imaginemos que las empanadas, para que quede bien el repulgue, son más «mano de obra intensivas», pero como para freírlas en aceite con un quemador alcanza, requieren proporcionalmente menos gas.
Imaginemos también que, en esa economía, se decidió mantener artificialmente bajo el precio del insumo «gas» con subsidios, y artificialmente alto el precio del insumo «trabajo» con legislación. En esa economía distorsionada, los rotiseros van a elegir, de una manera racional, fabricar muchas más pizzas y menos empanadas de lo que sería socialmente deseable, dadas las dotaciones de gas y de trabajo.
Imaginemos ahora una situación dinámica que rompe el equilibrio. Imaginemos por ejemplo que se quitan los subsidios algas, y se simplifica la legislación laboral, de forma tal que el gas se vuelve comparativamente más caro, y el trabajo comparativamente más barato. En esa situación, a los señores rotiseros les va a convenir dejar de producir pizzas, y empezar a producir más empanadas.
¿a qué velocidad van a poder hacer esa transición? – Depende de cuál rígida o flexible sea la economía. En una economía abierta y flexible, rápidamente van a poder desarmarse los hornos y comparar ollas y quemadores y aceite para hacer empanadas; Contratar más gente, capacitar y cambiar el rol de los maestros pizzeros: Es decir, la economía se va a poder adaptar al nuevo óptimo relativamente más rápida que en una economía regulada y cerrada.
En el caso de las economías reguladas y cerradas, la Señal de Precios de los Insumos, no va a alcanzar a rápidamente cambiar la matriz productiva para llevarla al nuevo óptimo, sobre lo que se conoce como «frontera de posibilidades de producción»
un gráfico que ilustra esta situación:
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