Buenos Aires, 30 de noviembre de 2024 – Los alquileres en Argentina han experimentado una notable transformación en los últimos meses, con una tendencia creciente a acordar contratos en pesos y una indexación trimestral ajustada por el Índice de Precios al Consumidor (IPC). A diferencia de los picos de dolarización alcanzados en 2023, hoy las publicaciones en dólares se concentran principalmente en el alquiler temporario, mientras que el mercado de vivienda permanente ha vuelto a adoptar precios en moneda local.
Según un informe conjunto de la Universidad de San Andrés y Mercado Libre, el porcentaje de departamentos en alquiler publicados en dólares se redujo considerablemente en noviembre de 2024, situándose en 31,6%. Este porcentaje es un claro descenso respecto al 65,7% registrado en septiembre de 2023. Este cambio refleja el impacto de la derogación de la Ley de Alquileres y una caída de la inflación, que redujo el incentivo para fijar precios en dólares como protección frente a la devaluación del peso.
Paula Margaretic, investigadora de la Universidad de San Andrés, explicó a Agencia Noticias Argentinas que la proporción de alquileres en dólares comenzó a aumentar en 2018 y alcanzó su punto máximo poco antes de la derogación de la ley. Según Margaretic, la caída en la dolarización de los alquileres se debe a la flexibilidad que trajo consigo la derogación de la ley y la disminución de la inflación, factores que han reducido la necesidad de ajustar los alquileres en dólares.
En el conurbano bonaerense, la dolarización de los alquileres varía significativamente entre las distintas zonas. En el GBA Zona Norte, el 43,2% de los alquileres se publican en dólares, aunque en septiembre de 2023 esa cifra alcanzaba un máximo de 68,8%. En contraste, la dolarización es mínima en otras zonas del conurbano: solo el 3,46% de los alquileres en GBA Zona Oeste y el 10,9% en GBA Zona Sur se acuerdan en dólares.
Desde el Centro de Estudios Scalabrini Ortiz (CESO), se informó que en la Ciudad de Buenos Aires, la proporción de alquileres en dólares se situó en el 28% en noviembre de 2024, frente al 68% alcanzado en septiembre de 2023. La caída en la oferta de alquileres en dólares se atribuye a una menor inflación y la incertidumbre económica que solía impulsar la dolarización de los precios.
Marta Liotto, expresidenta del Colegio Inmobiliario de la Ciudad de Buenos Aires, señaló que los barrios de la ciudad más afectados por el fenómeno turístico, como San Telmo, Palermo y parte de Recoleta, son los únicos que mantienen una alta oferta de alquileres temporarios. El resto de los barrios y comunas se concentran en los alquileres habitacionales, en su mayoría contratos de dos años con ajustes por inflación.
Liotto destacó que la derogación de la Ley de Alquileres, que había sido muy cuestionada por su rigidez y sus efectos en el mercado inmobiliario, ha favorecido la vuelta de los propietarios a ofrecer sus propiedades en alquiler. Según la experta, esto ha reactivado el mercado habitacional, permitiendo a los inquilinos acceder a una mayor oferta de viviendas. «Hoy las inmobiliarias tenemos entre 7 y 10 inmuebles disponibles para ofrecer, lo que permite a los inquilinos elegir de acuerdo a sus necesidades», explicó Liotto.
Este cambio refleja una recuperación en el sector inmobiliario, donde los propietarios, al ver que se ha flexibilizado el régimen de alquileres, se sienten más motivados a poner sus propiedades en renta, lo que ha generado una mejora en la oferta de viviendas en alquiler permanente.
Con estos datos, el mercado de alquileres en Argentina parece haber encontrado un equilibrio tras la derogación de la Ley de Alquileres, con una vuelta a los contratos en pesos y un menor peso de la dolarización, lo que beneficia tanto a propietarios como a inquilinos.
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