A pesar de las declaraciones oficiales de los funcionarios de la Casa Rosada, quienes insisten en que la prioridad es la gestión y que la campaña electoral aún está lejos, en los pasillos de Balcarce 50 se teje un plan político estratégico para asegurar el triunfo oficialista en las elecciones legislativas de este año.
Thank you for reading this post, don't forget to subscribe!Mientras tanto, en el ámbito de La Libertad Avanza (LLA), el escenario es distinto. Los armadores políticos del espacio mantienen reuniones diarias con el objetivo de superar las debilidades territoriales del partido, que carece de gobernadores, intendentes y de un fuerte músculo parlamentario en las legislaturas. La estrategia, según los principales dirigentes, apunta a fortalecer la presencia de LLA en las provincias clave y a crear un equipo de trabajo que permita llegar con propuestas firmes a las urnas.
Uno de los objetivos principales de LLA es reunificar las estrategias políticas en dos territorios cruciales para las elecciones: la Capital Federal y la Provincia de Buenos Aires. Allí, figuras como la legisladora Pilar Ramírez y el dirigente Sebastián Pareja se destacan como piezas clave en la organización electoral, apuntando a consolidar el apoyo del electorado en estas zonas, donde la competencia será feroz.
Pero la estrategia de LLA no se detiene en la reagrupación interna. En paralelo, los arquitectos de la campaña libertaria, liderados por Santiago Caputo, buscan crear una mesa política que siga de cerca las indicaciones de Javier y Karina Milei. El desafío no es solo unificar la doctrina económica del oficialismo, centrada en la reducción del déficit fiscal y la baja de impuestos, sino también llevar a cabo una serie de proyectos que puedan ser presentados de manera simultánea en distintos distritos, para darle mayor visibilidad a las propuestas de la alianza.
A medida que las elecciones se acercan, los dos sectores, oficialismo y oposición, se preparan para una batalla política que se desarrollará tanto en las urnas como en las estrategias territoriales. Mientras el oficialismo ajusta su maquinaria de cara a la elección, La Libertad Avanza se reorganiza y busca capitalizar su apoyo en la opinión pública para llegar con fuerza a los comicios. En ambos frentes, la competencia por el voto será una de las más reñidas de los últimos años.