En un contexto de creciente tensión entre las provincias y el Gobierno nacional, dos senadores han presentado proyectos de ley que proponen el traslado de la Capital Federal desde Buenos Aires a las ciudades de Viedma, en Río Negro, y Paraná, en Entre Ríos. Estas iniciativas resucitan antiguas propuestas que, aunque han sido debatidas en el pasado, nunca llegaron a concretarse.
Los proyectos son impulsados por Edith Terenzi, senadora de la Unión Cívica Radical (UCR) por Chubut, y Edgardo Kueider, senador peronista de Entre Ríos. Ambos forman parte de Provincias Unidas, un nuevo bloque legislativo compuesto por gobernadores de diversas agrupaciones políticas, que busca consolidar su influencia en la Cámara alta.
Viedma: un anhelo histórico
El proyecto de Terenzi revive una idea promovida por Raúl Alfonsín en los años 80. La propuesta, respaldada por el gobernador de Chubut, Ignacio Torres, contempla el traslado de la Capital a una zona que abarca las actuales ciudades de Carmen de Patagones, Viedma y Guardia Mitre. En conversación con Ámbito, Terenzi afirmó que los motivos de la mudanza son aún válidos, argumentando que «la Patagonia posee enormes reservas energéticas y territorios estratégicos que justifican el cambio».
La senadora enfatizó la importancia de discutir una estrategia de desarrollo que contemple el interior del país, señalando que «la Patagonia, que representa un tercio del territorio nacional, aún está en deuda en términos de desarrollo y población». Terenzi invitó a los argentinos a abordar esta cuestión a largo plazo, a pesar de los desafíos inmediatos.
Paraná: la alternativa entrerriana
Por su parte, Kueider propone trasladar la Capital a Paraná, con el objetivo de promover el federalismo y desconcentrar el poder de Buenos Aires. Según su perspectiva, la saturación de la población en el Área Metropolitana de Buenos Aires ha desencadenado una serie de problemas, como la sobrecarga de servicios y un aumento de la desigualdad social. Kueider sugiere un proceso gradual que comenzaría con la reubicación de la Presidencia y otros organismos, con un plazo de tres años para su implementación.
El senador argumentó que varios países han tenido éxito en procesos similares de descentralización, citando ejemplos como el traslado de la capital brasileña de Río de Janeiro a Brasilia, que revitalizó una región antes poco desarrollada.
Respaldo popular y futuro incierto
Ambas propuestas ya han sido presentadas en el Senado y se espera que sean enviadas a comisiones para su debate. Un reciente sondeo de Zuban Córdoba revela que un 45,3% de los argentinos está de acuerdo con el traslado de la capital, mientras que un 32,5% se opone.
Los senadores Terenzi y Kueider se muestran optimistas sobre el futuro de sus proyectos, destacando la importancia de iniciar un debate que podría transformar la estructura política y territorial del país. En un momento donde las provincias buscan mayor visibilidad, estas propuestas representan una oportunidad para discutir el desarrollo equitativo y federal de Argentina.
Descubre más desde Nexus Contenido
Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.