La tensión entre Argentina y Venezuela continúa escalando debido al caso de Nahuel Gallo, el gendarme argentino detenido en Venezuela desde hace más de 15 días. El conflicto se intensificó luego de que el fiscal general del régimen de Nicolás Maduro, Tarek William Saab, ampliara la causa que investiga al uniformado por su supuesta implicación en un «plan terrorista», e incluyera en la investigación a la ministra de Seguridad de Argentina, Patricia Bullrich, y al canciller Gerardo Werthein.
Thank you for reading this post, don't forget to subscribe!Respuesta del canciller argentino
A través de un comunicado en la red social X, el canciller argentino Gerardo Werthein respondió a las acusaciones del fiscal venezolano, calificando sus declaraciones como un «intento burdo de desviar la atención» de los abusos cometidos por el régimen chavista. En su mensaje, Werthein apuntó directamente a Tarek William Saab, recordando que su gestión está marcada por violaciones a los derechos humanos, tales como desapariciones forzadas, secuestros ilegales y detenciones arbitrarias.
El funcionario argentino subrayó que, aunque Saab se siente en posición de emitir acusaciones, no le corresponde juzgar a las autoridades argentinas. “Esa tarea le corresponde a un tribunal internacional respetado, reconocido por los países que defienden los derechos humanos como un valor universal”, dijo Werthein, quien también advirtió que los derechos humanos no deben ser utilizados como una herramienta manipulable al servicio de intereses políticos, como, según él, ha ocurrido en Venezuela.
Las acusaciones de Venezuela
Horas antes, Tarek William Saab había difundido un comunicado en el que reafirmaba su postura sobre la detención de Gallo. El fiscal general del régimen venezolano insistió en que el gendarme argentino está involucrado en un “supuesto plan terrorista” que pone en riesgo la seguridad nacional de Venezuela. Saab aseguró que existen evidencias que comprometen a Gallo en hechos graves que serán evaluados en el proceso judicial correspondiente.
El funcionario chavista también señaló que la ministra Bullrich y el canciller Werthein tienen responsabilidades directas en el caso, y les reprochó el hecho de que, según las investigaciones de la justicia venezolana, ambos figuran en la cadena de mando de un grupo de supuestos terroristas enviados desde Argentina a Venezuela. Saab acusó a la ministra de Seguridad de Argentina de haber autorizado el viaje de Gallo sin notificar a las autoridades venezolanas, un acto que, según él, sentó un «grave precedente» en la región.
El fiscal venezolano también hizo referencia a declaraciones de Bullrich de marzo de 2024, en las que mencionaba el envío de gendarmes a Venezuela, supuestamente con “objetivos al margen del Derecho Internacional y la Ley”. Saab consideró que la ministra debe responder tanto al pueblo argentino como a los familiares de Gallo sobre los motivos detrás de esa decisión.
Tensión diplomática en aumento
Este intercambio de acusaciones entre ambos países refleja una creciente tensión diplomática, mientras el caso de Nahuel Gallo sigue siendo un punto de fricción en las relaciones bilaterales. La situación podría tener repercusiones en las dinámicas políticas de ambos gobiernos, con Argentina defendiendo la legalidad y derechos de sus ciudadanos, mientras Venezuela mantiene su postura sobre la seguridad nacional y la lucha contra el terrorismo.
Con la detención de Gallo aún sin resolución, el conflicto sigue abierto y se espera que, a medida que avance el proceso judicial, las autoridades internacionales tomen un rol clave para garantizar el respeto a los derechos humanos y el debido proceso.
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